El Comercio 28 de julio del 2009
PUNTO DE VISTA
Gerencia después de la crisis
Por: Carmen Rosa Graham Administradora
En estos días de relativo optimismo por algunas mediciones que indicarían que la economía global comienza su recuperación y que en el Perú probablemente tocó piso (de esto no estamos tan seguros), y con la esperanza de que no sea para un próximo deterioro (aquí vienen las teorías de la W, la L, la V, etc.), es oportuno pensar en la etapa luego de la crisis.
Con cada crisis muchas cosas cambian, y en esta oportunidad me gustaría destacar tres temas: la realidad de la globalización, el rol del Estado y la gerencia.
Estamos convencidos de que las crisis globales son de todos, que no existen paraguas ni blindajes. Temas de comercio, energía, cambio climático, agua, etc. nos afectan y nos afectarán a todos. Las medidas de protección solo alcanzan en algunos casos a apaciguar los efectos pero no a evadirlos. Es imprescindible que un gerente conozca lo que sucede en el mundo y comprenda sus tendencias, eliminando esa cultura “Perú-centrista” que caracteriza a muchos peruanos.
El Estado tendrá un rol mayor al actual en reglamentación e intervención en la economía, en unos países más que en otros, y en comercio internacional debemos conocer esos cambios en los países con los que negociamos. La tendencia sería a gobiernos más robustos, ergo, mayores consumidores, con lo que serían clientes más importantes para aquellos que proveen a entidades gubernamentales. El tema de Estado incrementa el riesgo cuando observamos la región y algunos afanes por la perpetuidad.
Como consecuencia de los avances tecnológicos y del repensar la economía y los modelos empresariales, la gerencia tiene aun más retos. En la evolución del sistema de gestión llegamos a definir un conjunto de indicadores, basados en modelos estadísticos con los cuales se proyecta el consumo y, en consecuencia, la producción. Esto hoy no es suficiente. El reto actual es desarrollar un modelo de inteligencia de negocios que incluya también variables de comportamientos humanos y sociales en aquellos modelos matemáticos que ayuden a predecir la preferencia y el comportamiento del consumidor.
Al llegar al gusto del cliente y crear una relación de respeto y cumplimiento se va fortaleciendo la confianza, valor cada vez más privilegiado por el consumidor ante el empobrecimiento de los sistemas que alimentan la confianza en personas, instituciones y sociedades.
Otra característica es la polarización de las empresas, pocas se hacen más fuertes y muchas se debilitan. Estas últimas se hacen especialmente atractivas para adquisición por parte de sus competidores o de aquellos que buscan integrar su cadena productiva. En el Perú se da con doble efecto, el de las adquisiciones entre grandes corporaciones mundiales y el de las empresas nacionales.
En resumen, seguimos evolucionando, y queda claro que se requiere una gerencia de actuar cada vez más profesional, que integre conceptos y disciplinas creando modelos de negocio exitosos y responsables que generen confianza en un mercado internacional.
CGOPINA@GMAIL.COM
No hay comentarios:
Publicar un comentario