EXPOSICIÓN. “Ordenando el mundo”

El arte peruano a través de sus bodegones

ÉLIDA ROMÁN PROPONE UNA MUESTRA DIDÁCTICA QUE NOS APROXIMA AL VALOR SIMBÓLICO DE LAS NATURALEZAS MUERTAS. CADA OBRA PROPONE SUTILMENTE AL ESPECTADOR VALORES CULTURALES, ESTÉTICOS, MORALES Y RELIGIOSOS

Por: Alberto Villar Campos

Miércoles 17 de Agosto del 2011

“La naturaleza muerta es algo a lo que los artistas recurren porque es perfecto para la construcción de la imagen. Y lo hacen porque es una solución para tratar de trasladar cosas que no son necesariamente las que ves y encontrarles un sentido”. Así explica Élida Román el significado de los trabajos que podremos ver en “Ordenando el mundo…”.
Desde el simbolismo religioso hasta las composiciones con objetos extraídos de la vida cotidiana (frutas, flores, animales y un largo etc.), los bodegones les han dado la posibilidad a los artistas de explorar con libertad desde distintos ángulos: desde el uso del color y la luz en el lienzo hasta la experimentación con técnicas mixtas.
Y el arte peruano no ha estado ajeno a estas aproximaciones. Para esta muestra, Román no ha querido dejar ningún cabo suelto y, por ello, con un objetivo –diríamos– pedagógico, la curadora nos permite observar, por ejemplo, el célebre retrato de Pedro de Peralta Barnuevo, hecho por Cristóbal de Aguilar en 1751, en el cual se ve al sabio en su biblioteca y, cerca de una de sus manos, algunos de sus instrumentos de investigación y los libros que escribió; o la pintura de José Fernando de Abascal, virrey peruano, en cuyo retrato, pintado en 1807 por Pedro Díaz, se observa una lista de sus obras públicas más recordadas. “En ambos casos, el artista contaba lo que hacía tal persona, nos contaba su vida”, explica.
Junto con ello, podremos ver obras de artistas más recientes que a lo largo de su vida volvieron a la naturaleza muerta. Entre ellos, resaltan Ricardo Grau, que cultivó el género en sus distintas etapas de estilo; Emilio Hernández Saavedra, de quien destaca una pieza en la que, además de frutas y una jarra de vino, se aprecia una casaca puesta sobre una silla de madera; José Sabogal, con un desnudo enmarcado por un canasto con frutas; o Sérvulo Gutiérrez, con un hermoso bodegón marcado por gruesas pinceladas oscuras.
La escultura estará también presente con las obras de Carlos Runcie Tanaka (un espectacular y breve florero de cangrejos de papel), Patricia Camet y Eugenio Raborg. Por el lado de la fotografía, podremos ver imágenes, como la de la portada de esta edición de Luces, de Antonio Ramos.
Pero, además, Román ha querido desvelar ciertos acercamientos a las naturalezas muertas a través de pinturas murales anónimas encontradas en las arquerías del Convento de Santa Catalina, en Arequipa; y en recintos religiosos del Cusco. “El arte popular también rescata este tipo de representaciones”, subraya.
“Ordenando el mundo…” es la primera de una serie de exposiciones con las que Román intentará repasar la historia del arte en nuestro país a través de la naturaleza muerta, el paisaje, las abstracciones, el retrato y, por último, la vida cotidiana. “Quiero que la gente sepa que las cosas más aparentemente intrascendentes pueden ser importantes”, finaliza.
MÁS INFORMACIÓN
Lugar: Galería John Harriman dirección: Bellavista 531, Miraflores día y hora: de lunes a sábado, de 9 a.m. a 9 p.m., domingos y feriados de 2 p.m. a 8 p.m. ingreso: libre, abierta al público desde el jueves 18.