martes, 5 de mayo de 2009

Cultura empresarial, Ciencias Sociales

El Comercio 5 de mayo del 2009

PUNTO DE VISTA

¡Que su empresa no se paralice!
Por: Carmen Graham Administradora

En tiempos de turbulencia, las empresas bien gestionadas se distinguen por contar con equipos gerenciales, directores y accionistas que comprenden cuán expuestos están a riesgos muchas veces impredecibles y que toman precauciones no solo para minimizar los impactos negativos para la empresa sino que hasta puedan provocar efectos positivos para sus estados financieros.

Muchas veces, cuando se comenta sobre el concepto de riesgo, los funcionarios suelen relacionarlo con fraudes, los cuales son una parte importante, mas no es la única ni necesariamente la que más impacta en las finanzas. Existen más de 100 tipos de riesgo y hay desde los conocidos fraudes, hasta de recursos humanos, climatológicos, de terrorismo y desorden civil, de desastres naturales, de competidores y de gobiernos. Fíjese usted cuántas situaciones venimos enfrentando en el último año: cambio climático, crisis internacional y pandemia, además de las circunstancias de competencia, legislativas y fiscales. Si bien cada una tiene una génesis diferente, la empresa se ve afectada por todas al mismo tiempo. El impacto dependerá de su sector de actividad y de cuán preparada esté para afrontar complicaciones. Se agrega a esto que, en tiempos como los actuales, la innovación se acelera y se suelen lanzar rápidamente al mercado productos y servicios que no necesariamente han sido probados con la calidad requerida. Esto suma riesgos.

¿Entonces, qué se puede hacer? Lo más recomendable es fortalecer nuestras prácticas de gobierno corporativo, para crear una cultura de ética empresarial y desarrollar un plan de gestión de riesgo. Reforzar estos dos campos hará que el impacto negativo se reduzca y que podamos tener ventajas en situaciones complejas, sobre todo si sus competidores no se preparan de la misma manera.

En próximas oportunidades ampliaremos estos dos conceptos. Por ahora, es importante mencionar que el fortalecimiento de la cultura ética corporativa es el mejor seguro que una organización puede desarrollar, pues se trata de crear conciencia y autocontrol por parte de cada uno de los trabajadores y su gestión. Por supuesto que sus efectos positivos van aun más allá de los temas de riesgo.

Algunas firmas piensan que creando un comité, aplicando modelos matemáticos y analizando ratios periódicamente ya tienen resuelto el tema. Todo esto es, por lo general, necesario, pero lo más importante es crear esa cultura de previsión porque toda, absolutamente toda organización está expuesta.

Y es que analizar los riesgos a los que nuestro negocio está expuesto no impide que sucedan problemas, pero lo más importante es estar conscientes de que nos puede suceder, tener una idea de sus efectos y sobre todo no paralizarnos ante los hechos, viendo que los competidores siguen avanzando.

RECTORA DE LA UNIVERSIDAD DEL PACÍFICO

No hay comentarios: