miércoles, 11 de agosto de 2010

Orientación y Consejería








NO LOS FUERCE A ACEPTAR LA SITUACIÓN

Hijos y nuevas parejas de padres
Miércoles 11 de Agosto del 2010

La etapa de la adolescencia se caracteriza por la rebeldía que domina el comportamiento de los jóvenes. Por ello, si por circunstancias de la vida, el padre o la madre inician una nueva relación amorosa, esta situación puede ser un detonante de conflicto entre los hijos y la nueva pareja, que se manifestaría en un rechazo de los menores hacia esta última.

La comunicación y la sinceridad serán factores importantes para establecer una buena relación entre los adolescentes y sus madres o padres sustitutos.

“Los adolescentes tratan de consolidar su identidad y superar sus confusiones. No soportan que sus progenitores pretendan engañarlos u ocultarles una nueva relación. Por ello, es importante ser claros cuando alguno de los padres ha decidido formalizar una nueva relación”, recomienda la psicóloga Carmen Valenzuela, directora del Centro de Investigación y Atención en Psicoterapia Latinoamericano (Ciapla).

Para lograr el acercamiento, los padres son los llamados a conversar primero con sus hijos y explicarles que han decidido compartir su vida con una nueva persona. “Sea franco, no presente a la pareja solo como una amistad. Deje en claro, si es necesario, que no se trata de que los hijos aprueben o no la relación sino que esa es la persona que el progenitor ha elegido y por eso desea que sus hijos la conozcan”, enfatiza Carmen Bravo de Rueda, psicóloga de la clínica Ricardo Palma.

Para un adolescente no es fácil aceptar las nuevas circunstancias en su familia. Es un proceso que le tomará tiempo asimilar. Por ello ambas especialistas concuerdan en que no se debe forzar una relación entre las dos partes y en que se debe tener mucha paciencia y confianza para que la relación fluya naturalmente.

PUNTO DE VISTA
Incentive la comunicación
La llegada de un padrastro o una madrastra puede ser desafiante para un hijo adolescente. Sin embargo, los padres no pueden actuar como si la nueva pareja no existiese; por ello el diálogo con los hijos debe primar sobre los sentimientos negativos.

Es importante que los ex esposos mantengan una relación respetuosa entre ellos. Si la ex pareja inicia una nueva relación, es inevitable que esta se relacione con sus hijastros. Por ello no use a los hijos como intermediarios, ni los interrogue sobre lo que sucede en la otra casa y no los indisponga; más bien, fomente la comunicación, la tolerancia y la realización de actividades conjuntas entre hijos y padrastros, sin forzarlos.
ELIZABETH ALIAGA. Psicóloga de la PUCP

PARA TENER EN CUENTA
Relaciones distintas
Aprenda a separar la relación padres-hijos de la relación con su nueva pareja. Es decir, esta no puede pretender establecer un nuevo orden en la familia. Si percibe un ambiente negativo, debe entender primero la razón de ello y tener paciencia, pues los cambios tomarán algún tiempo.

Las madrastras o los padrastros deben aceptar que los hijos de sus parejas necesitan espacios para compartir a solas con sus padres. No es suficiente compartir casa o rutina. Se requiere de espacios de diálogo y distracción solo entre padres e hijos.

Si hay rechazo hacia la nueva persona, no le imponga al adolescente su presencia. Sin embargo, esto no significa que renuncie a su relación.

1 comentario:

Jose Luis Follana dijo...

muy buen articulo, sirve para tomar las cosas mas sabiamente