lunes, 22 de agosto de 2011

Ciencias Sociales






NFOQUE

¿Qué significa tener buenos fundamentos económicos?

Por: Luis Davelouis Lengua Periodista
Sábado 20 de Agosto del 2011
En un escenario de crisis como el actual, puede parecer un poco raro el que se afirme que el Perú o sus empresas tienen buenos fundamentos económicos. Después de todo, esos fundamentos no son más que cifras que dependen de otras cifras que no necesariamente tienen que ver con el desempeño del país o de la empresa, sino de sus respectivos entornos y las coyunturas a las que se enfrentan.
“Tener buenos fundamentos significa tener todas tus cuentas equilibradas a nivel macroeconómico, a nivel empresarial o de sector”, explica el gerente de estudios económicos del Scotiabank, Guillermo Arbe.
En efecto, la balanza comercial del Perú es positiva, lo cual significa que lo que vendemos es todavía más que lo que compramos y genera riqueza que se queda aquí. No tenemos un déficit fiscal estructural, es decir, muy rara vez gastamos más de lo que ganamos (de hecho tenemos ahorros que veremos más adelante); tenemos una deuda pública que equivale a poco menos del 24% del PBI, 40% de la cual está en soles que nosotros mismos emitimos. Y, por último, tenemos reservas internacionales netas de alrededor de S/.50.000 millones, todo lo cual nos da cierta holgura si se produjeran corridas de capitales hacia el exterior.
“En general, tenemos un grupo de indicadores que muestra que el país tiene una interesante capacidad de atracción de nuevos proyectos de inversión”, afirma el ex viceministro de Economía Eduardo Morón.
Pero también están los ahorros: el Fondo de Estabilización Fiscal (FEF) está en alrededor de US$5.600 millones, que pueden ser utilizados si se produjera una paralización brusca de la inversión privada que lleve a un decrecimiento de la actividad económica. Además de otros ahorros fiscales y del ahorro privado (que está en bancos y en las AFP) y que sumados superan los US$20.000 millones.
¿Y LAS EMPRESAS?
Pues funciona parecido. Las empresas peruanas tienen alta liquidez y bajo apalancamiento. Un buen ejemplo son los bancos: no tienen deudas sustanciales de corto plazo, tienen mucha liquidez, altos márgenes de operación y una morosidad muy baja.
Sin embargo, cómo les vaya depende también de cómo le vaya al país y de la interacción con este, con un Estado que mantenga las reglas claras y la situación predecible. Sin certeza, aumenta el riesgo y viceversa. Y los fundamentos pueden ser muy buenos, pero rara vez inamovibles.

No hay comentarios: