CONTRA EL ENVEJECIMIENTO CELULAR

El efecto antioxidante del café

Martes 9 de Agosto del 2011

Por la mañana, en la tarde o en la noche, en alguna reunión social, después de clases o durante horas del trabajo, cargado, pasado o sin azúcar. Tomar café es para muchos un hábito, parte de nuestra rutina, por lo que no solemos reparar en sus efectos en la salud. “Su carencia en el organismo genera el deterioro y la muerte de células”, nos dice María Esther Lizano Bazalar, nutricionista del hospital Cayetano Heredia.
El café contiene unas sustancias denominadas polifenoles cuyas funciones son antioxidantes, pues ayudan a retrasar el envejecimiento de las células. El consumo del café permite eliminar de nuestro organismo los radicales libres, capaces de dañar las células y causar alteraciones en el organismo.
Tiene a la cafeína como uno de sus componentes esenciales, la cual actúa como estimulante diurético sobre el sistema nervioso central, corazón, venas, arterias y riñones. Ayuda en la concentración, reduce el dolor de cabeza, evita coágulos sanguíneos, mejora el asma y las alergias y previene la formación de cálculos, etc.
Aunque años atrás se ponía en duda su consumo por los posibles efectos adversos para la salud, Lizano destaca que estudios epidemiológicos concluyen que el café otorga múltiples beneficios si es tomado en cantidades moderadas. “Se trata de un producto natural que ayuda a prevenir numerosas enfermedades y a mantener una vida más saludable”, remarca.
Según Lizano, su consumo es recomendado para la prevención del cáncer de hígado y colon, diabetes tipo 2, enfermedad de Parkinson, y ya que actúa como diurético, previene las enfermedades de tipo neurodegenerativo.
Se debe tener especial cuidado con los niños menores de 5 años, ya que estos son los mejores consumidores de cafeína en otros compuestos. “Al ingerir una bebida gaseosa con cafeína, recibe el equivalente a 4 tazas de café”, advirtió la nutricionista.
PARA TENER EN CUENTA
El aporte energético del café es de 2 kilocalorías por taza de tamaño regular, precisa la nutricionista María Esther Lizano.
Las propiedades del café se mantienen en cualquier presentación. Hay que procurar su consumo moderado: el 98% del contenido debe ser agua.
Lo ideal es beber de 1 a 2 tazas diarias de café. La experta aclara que el consumo entre un adulto y niño no es igual y debe ser acorde con el peso.